Así un 21 de septiembre del año 2012 mi vida se puso patas para arriba y fue tan díficil de volver a acomodar. Primero intente secar las lagrimas y dar rápidamente vuelta la hoja ¡ que ilusa!
Pasé por tanto esos meses posteriores: la gente preguntándome por la panza, mi hermana (la única que tengo y a la que adoro) tuvo a su bebé justo 10 días después... y yo me encontraba ahí todos los días yendo a ver a mi sobrino, con puertas llenas de carteles de bienvenidas, flores, felicitaciones, mamaderas.
Hoy pienso lo poco que me cuide, lo que no me priorice, mi hermana hubiese entendido perfectamente; el tema era yo, en mi afán de dar vuelta la hoja, me mostraba superada de una situación que para nada lo estaba.
Fueron muchas las situaciones por las que pase de esa manera, mostrándome que ya estaba bien y por dentro me estaba haciendo tanto daño...tanto! si hoy volviera el tiempo atrás viviría el duelo como lo que era un momento tremendamente triste, en el cual no tenía ganas de nada...
Así , llegó diciembre, unas fiestas tristes pero como siempre aguantando estoica!
Hasta que un día explote, todo lo guardado empezó a salir y no de la mejor manera, salio como pudo o como yo lo deje!
Hoy en terapia hable de vos. Si, sin conocerte.
ResponderEliminarHay que soltar, como sea, pero SACAR!
las respuestas no las tiene nadie, excepto uno mismo ahi dentro.
Que la paz llegue, como sea, a como de lugar.
un abrazo